dimecres, 10 de maig del 2017

Modelo de empresario en una economia de izquierda


En detalle

Resumen
Los empresarios serán un pilar fundamental en una economía gestionada desde la perspectiva de la izquierda y se tendrán que caracterizar por emprender actividades con responsabilidad económica, social y ecológica, de las que obtendrán un beneficio a largo plazo como consecuencia de su buena gestión.

Texto
La izquierda es enemiga de los empresarios ?

La izquierda cree que el bien común no tiene que estar supeditado a los intereses privados y propugna una sociedad con equidad, objetivo que puede ser ampliamente aceptado, a pesar de que siempre se producen divergencias al decidir que camino hay que escoger para conseguirlo.

Un prejuicio que siempre ha dominado en la izquierda ha sido el de considerar al empresario como una figura negativa, en contraposición al trabajador que era considerado el único elemento que creaba valor, buena parte del cual era apropiado por el empresario / capitalista.

Pareciera como si, en caso de un triunfo de la izquierda, TODOS los empresarios fuesen enemigos a los que se hubiera de controlar para evitar que pusieran impedimentos a las políticas de la izquierda.

Esta concepción parte del prejuicio de que TODOS los empresarios son especuladores y de que siempre buscan el máximo beneficio a corto plazo, explotando a los trabajadores.

Este prejuicio condena, en ambientes de la izquierda, a toda persona que emprende una actividad económica a ser mal vista, a verse obligada a justificarse, diciendo que su empresa es pequeña... Todo esto perjudica la credibilidad de la economía de izquierda porque toda economía siempre necesita personas innovadoras, emprendedoras y capaces de gestionar proyectos.

Entonces, si renegamos de los empresarios y los consideramos enemigos a batir, cómo podemos plantear la economía de izquierda como una alternativa creíble ?


Los valores dominantes en nuestra sociedad

No nos engañemos: la búsqueda del beneficio fácil, el individualismo, el consumismo, la competitividad ... son valores compartidos por buena parte de las personas, sean empresarios, trabajadores, jubilados, estudiantes ... Por desgracia son valores dominantes en la sociedad actual, fundamentados mayoritariamente en el neoliberalismo. Son los valores aprendidos y interiorizados en las escuelas y universidades, en los trabajos, en los medios de comunicación... y que son los hegemónicos en la sociedad actual.

Si consiguiéramos que triunfase una propuesta de economía de izquierda, que se basase en los valores de la cooperación, la solidaridad y el bien común, seguiríamos necesitando empresarios y trabajadores que gestionasen la economía. Desde la izquierda se supone que los trabajadores estarían preparados para una economía más equitativa pero, cómo tendrían que ser nuestros empresarios ?


El perfil del empresario en una economía de izquierda

Podríamos hacer el ejercicio de buscar los valores, comportamientos,... necesarios para definir un modelo de militante de izquierda ejemplar (pero dejemos este divertimento para otro momento). Lo que propongo, en esta entrada de mi blog, es definir cuál tendría que ser el modelo de empresario ideal de la izquierda.

Como iniciador, impulsor o gestor de una empresa (privada o pública, con o sin ánimo de lucro) tendría que obtener beneficio a largo plazo de su actividad. La obtención de beneficio es un indicador de la viabilidad de la empresa y de su adecuada gestión. Pero no se trata de obtener beneficio a corto plazo, a cualquier precio, sino que este beneficio sea una consecuencia colateral del trabajo bien hecho.

Nuestro empresario vería la empresa como un conjunto de persones que colaboran en un proyecto común y, en este sentido, daría un papel importante a la participación de los trabajadores en la toma de decisiones. Buscaría consolidar un equipo de trabajadores estable y bien remunerado al que facilitaría una formación continua. Recordemos que no estamos hablando de un empresario que busque el máximo beneficio a corto plazo a costa de bajar salarios o deslocalizar y de disminuir la calidad de las primeras materias, sino de un empresario serio y responsable.

Nuestro empresario tendría que gestionar la empresa teniendo en consideración que está inmerso dentro de una sociedad y de un espacio físico de los que depende su supervivencia y, consciente de que sus intereses no podrían pasar nunca delante del bien común, tendría un comportamiento respetuoso al máximo con el medio natural y contribuiría realmente (no como una mera táctica de marketing) al mejor funcionamiento de la sociedad.

Estamos hablando, pues, de un empresario responsable desde todos los puntos de vista (empresarial, social y ecológico) que no plantearía su actividad con el objetivo primario de conseguir beneficio sino que lo obtendría como consecuencia de la eficiencia de su empresa. Un empresario que no necesitaría recorrer a comportamientos ilegales ni poco éticos para conseguir unos «máximos» beneficios que no son indicadores válidos de una buena gestión porqué, en realidad, nunca se pueden consolidar a largo plazo.

Estoy seguro que la mayoría de accionistas de grandes empresas con ánimo de lucro también preferirían este empresario responsable que estamos definiendo.


El empresariado y la implantación de una economía de izquierda

El objetivo de los empresarios no tiene que ser la implantación de una economía de izquierda, ni tampoco el mantenimiento de una economía neoliberal. Su función, con independencia de su ideología personal, es la de crear, impulsar y gestionar las empresas.

Para implantar realmente una economía de izquierda no es suficiente escoger un gobierno que la propugne. Será preciso, además, un cambio de valores en la sociedad que afectará los comportamientos de administraciones, empresarios, trabajadores , consumidores, contribuyentes, ahorradores ... Por qué no empezamos quitándonos de encima prejuicios como que los empresarios siempre son el enemigo ?

dissabte, 29 d’abril del 2017

Model d’empresari en una economia d’esquerra

Més en detall

Resum
Els empresaris seran un pilar fonamental en una economia gestionada des de la perspectiva de l’esquerra i s’hauran de caracteritzar per emprendre activitats amb responsabilitat econòmica, social i ecològica, de les que obtindran un benefici a llag termini com a conseqüència de la seva bona gestió.

Text
L’esquerra és enemiga dels empresaris ?

L’ esquerra creu que el bé comú no ha d’estar supeditat als interessos privats i propugna una societat amb equitat, objectiu que pot ser àmpliament acceptat, malgrat que sempre es produeixen divergències en decidir quin camí ens hi ha de portar.

Un prejudici que sempre ha dominat en l’esquerra ha estat que l’empresari era una figura negativa, en contraposició amb el treballador que era l’únic element que creava valor, bona part del qual era apropiat pel empresari / capitalista.

Sembla com si, en cas d’un triomf de l’esquerra, TOTS els empresaris fossin uns enemics als que s’hagués de controlar per evitar que posessin pals a les rodes a les polítiques d’esquerra.

Aquesta concepció parteix del prejudici que TOTS els empresaris són especuladors i que sempre busquen el màxim benefici a curt termini, explotant al treballadors.

Aquest prejudici condemna, en els ambients de l’esquerra, a tota persona que empren una activitat econòmica a sentir-se mal vista, a veure’s obligada a justificar-se, dient que la seva empresa és petita... Tot plegat fa molt mal a la credibilitat de l’economia d’esquerra perquè tota economia necessita persones innovadores, emprenedores i capaces de gestionar projectes.

Llavors, si reneguem dels empresaris i els considerem enemics a batre, com podem plantejar l’economia d’esquerra com una alternativa creïble ?


Els valors dominants a la nostra societat

No ens enganyem: la recerca del benefici fàcil, l’individualisme, el consumisme, la competitivitat ... són valors compartits per bona part de les persones, siguin empresaris, treballadors, jubilats, estudiants ... Per desgràcia són valors dominants en la societat actual, fonamentats majoritàriament en el neoliberalisme. Són els valors apresos i interioritzats a les escoles i universitats, a la feina, als mitjans de comunicació... i que són els hegemònics en la societat actual.

Si aconseguíssim que triomfés una proposta d’economia d’esquerra, que es basés en valors com la cooperació, la solidaritat i el bé comú, seguiríem necessitant empresaris i treballadors que gestionessin l’economia. Des de l’esquerra se suposa que els treballadors estarien preparats per una economia més equitativa però, com haurien de ser els nostres empresaris ?



El perfil de l’empresari en una economia d’esquerra

Podríem fer l’exercici de buscar els valors, comportaments,... necessaris per definir un model de militant d’esquerra exemplar (deixem, però, aquest divertiment per a un altre moment). El què proposo, en aquesta entrada, és definir quin hauria de ser el model d’empresari ideal de l’esquerra.

Com a iniciador, impulsor o gestor d’una empresa (privada o pública, amb ànim de lucre o sense) hauria d’obtenir benefici a llarg termini de la seva activitat. La obtenció de benefici és un indicador de la viabilitat de l’empresa i de la seva adequada gestió. No es tracta, però, d’obtenir benefici a curt termini, a qualsevol preu, sinó que aquest benefici sigui una conseqüència col·lateral de la feina ben feta.

El nostre empresari veuria l’empresa com a un conjunt de persones que col·laboren en un projecte comú i, en aquest sentit, donaria un paper important a la participació dels treballadors en la presa de decisions. Buscaria consolidar un equip de treballadors estable i ben remunerat al que facilitaria formació contínua. Recordem que no estem parlant d’un empresari que busqui el màxim benefici a curt termini a costa de baixar salaris o deslocalitzar i de disminuir la qualitat de les primeres matèries, sinó d’un empresari seriós i responsable.

El nostre empresari hauria de gestionar l’empresa tenint en consideració que està immers dins d’una societat i d’un espai físic dels que depèn la seva supervivència i, conscient de que els seus interessos no podrien passar mai per sobre del bé comú, tindria un comportament el màxim de respectuós amb el medi natural i contribuiria realment (no com a tàctica de màrqueting) al millor funcionament de la societat.

Estem parlant, doncs, d’un empresari responsable des de tots els punts de vista (empresarial, social i ecològic) que no plantejaria la seva activitat amb l’objectiu primari d’obtenir benefici sinó que l’obtindria com a conseqüència de l’eficiència de la seva empresa. Un empresari que no necessitaria recórrer a comportaments il·legals ni poc ètics per aconseguir uns «màxims» beneficis que no són indicadors vàlids d’una bona gestió perquè, en realitat, mai es poden consolidar a llarg termini.

Estic segur que la majoria d’accionistes de grans empreses amb ànim de lucre també preferirien aquest empresari responsable que estem definint.

L’empresariat i la implantació d’una economia d’esquerra

L’objectiu dels empresaris no ha de ser pas la implantació d’una economia d’esquerra, ni tampoc el manteniment d’una economia neoliberal. La seva funció, amb independència de la seva ideologia personal, és la de crear, impulsar i gestionar les empreses.

Per implantar realment una economia d’esquerra no n’hi haurà prou en escollir un govern que la propugni. Caldrà, a més, un canvi de valors dins de la societat que afectarà als comportaments de administracions, empresaris, treballadors, consumidors, contribuents, estalviadors... Per què no comencem traient-nos de sobre prejudicis com que els empresaris sempre són els enemics ?